Hoshin Kanri en el Camino de la Calidad Total

Esta semana quiero comenzar a hablar de una herramienta que resulta de gran importancia cuando queremos implementar una política lean de Mejora Continua en nuestra organización manufacturera. Se trata del sistema Hoshin Kanri. Este término japonés encierra en sus dos vocablos una metáfora muy importante: Ho significa “dirección”; Shin:“aguja”, Kan:“control” y Ri:“razón”.

El concepto más cercano en nuestra lengua sería el de una “brújula” para la gestión empresarial. Hoshin Kanri nació en los años ochenta y Ryuji Fukuda ha sido uno de sus más brillantes exponentes al potencializar el sello Sony en su manufactura de televisores. Basta hacer un poco de memoria para recordar el impacto de esta marca durante esos años. Hoshin Kanri es un sistema de gestión directiva que nos va orientar, cual brújula, en la ejecución de estrategias de Mejora Continua de manera certera y eficaz.

La flexibilidad del sistema juega en dos vertientes. Una es tocante a la directiva, de la cuál se deriva experiencia y creatividad para la implementación de estrategias de productividad; pero por el otro lado se nutre de la base de la pirámide; es decir, de empleados a la directiva, puesto que ellos también tienen experiencia y creatividad que compartir: están cerca de los clientes, de los problemas y de la competencia, por lo tanto su perspectiva tiene una dimensión más interesante que la de muchos directores. Quizá se preguntarán por qué aun cuando han diseñado estrategias de crecimiento, no han logrado los resultados deseados. La siguientes cifras hablan por sí solas: tan sólo el 5% de la fuerza laboral entiende la estrategia; el 85% de los ejecutivos invierten menos de una hora al mes en discusiones estratégicas, sólo el 60% de las organizaciones invierten en estrategia.

¿Cuáles son los primeros pasos para rectificar el rumbo? Sacar la brújula.